(AMPLIACIÓN) Corea del Sur y EE. UU. realizan un ejercicio aéreo conjunto con un bombardero B-52H y cazas F-22 estadounidenses

Seúl, 20 de diciembre (Yonhap) -- Corea del Sur y Estados Unidos han realizado, este martes, un ejercicio aéreo conjunto, en el que participaron un bombardero estratégico B-52H y cazas furtivos F-22 estadounidenses, en un esfuerzo para reforzar la credibilidad de la "disuasión extendida" de EE. UU., según ha informado el Ministerio de Defensa surcoreano.

Los simulacros tuvieron lugar en la zona de identificación de defensa aérea de Corea del Sur, en el suroeste de la isla meridional de Jeju, en medio de las tensiones provocadas por el lanzamiento de dos misiles balísticos de medio alcance (MRBM, según sus siglas en inglés), realizado, el domingo, por Corea del Norte.

En los simulacros también participaron aviones furtivos F-35A y cazas F-15K surcoreanos.

La sesión de entrenamiento contribuyó a mejorar la interoperabilidad entre las fuerzas aliadas y fortalecer sus capacidades operativas, en tanto que los cazas de última generación de ambos países practicaron procedimientos para escoltar y proteger al bombardero, un activo estratégico clave de EE. UU., dijo el ministerio.

Está previsto que, esta semana, los aviones F-22 de la Base Aérea de Kadena, en Okinawa, Japón, sean desplegados a la Base Aérea de Kunsan, en Gunsan, a 275 kilómetros al sur de Seúl. Estas aeronaves participarán en otro programa de entrenamiento conjunto con aviones F-35A surcoreanos, con el fin de reforzar la capacidad aliada para responder a las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte.

Los aviones de combate estadounidenses F-22 visitaron previamente Corea del Sur, para efectuar ejercicios aéreos, en 2018.

El ministerio declaró, en un comunicado de prensa, que el despliegue, en esta ocasión, del bombardero B-52H y los cazas F-22, forma parte de un esfuerzo para reforzar la credibilidad de la disuasión extendida estadounidense.

La disuasión extendida se refiere al compromiso de EE. UU. de utilizar toda su capacidad militar, incluida la nuclear, para defender a su aliado.

El ministerio realizó los comentarios en referencia a un acuerdo alcanzado durante las conversaciones ministeriales de defensa de los aliados, celebradas, el mes pasado, para aumentar la frecuencia e intensidad del despliegue de los activos estratégicos estadounidenses en la península coreana.

Agregó que Corea del Sur y EE. UU. consolidarán, aún más, la postura de defensa combinada de la alianza entre ambas naciones frente a las amenazas nucleares y de misiles norcoreanas, continuando el fortalecimiento de las capacidades y la postura de la alianza, incluida la disuasión extendida estadounidense.

El Ejército de Corea del Sur describió los misiles norcoreanos, lanzados el domingo, como MRBM. No obstante, el Norte afirmó que el lanzamiento era parte de un esfuerzo de desarrollo de satélites de reconocimiento.

El lanzamiento se llevó a cabo en el recinto principal de lanzamiento de cohetes en Tochang-ri, en el oeste de Corea del Norte, donde el Norte afirmó haber probado, la semana pasada, un motor de cohete de "combustible sólido de alto empuje" para desarrollar otro "nuevo tipo de sistema de arma estratégica".

La prueba del motor fue considerada como parte de la iniciativa de Pyongyang para desarrollar un misil balístico intercontinental (ICBM) de combustible sólido, el cual necesita menos tiempo de preparación de lanzamiento que uno de combustible líquido, que requiere la inyección de combustible y otros procedimientos.

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