Los exfuncionarios contraargumentan las alegaciones sobre el caso de la muerte del oficial de pesca

Seúl, 27 de octubre (Yonhap) -- Los funcionarios de alto rango de la anterior Administración de Moon Jae-in han acusado al Gobierno actual de utilizar la muerte de un funcionario de pesca surcoreano, a manos de Corea del Norte, en 2020, como una herramienta de represalia política, alegando que la Administración Moon no manipuló el caso.

La Administración Moon ha sido acusada de concluir, sin pruebas suficientes, que el funcionario de pesca, Lee Dae-jun, fue asesinado cuando intentaba desertar hacia Corea del Norte, en lo que los críticos dicen que era parte de los esfuerzos del entonces Gobierno surcoreano para ganarse el favor de Pyongyang.

El exministro de Defensa Suh Wook y el ex comisario general de la Guardia Costera, Kim Hong-hee, fueron arrestados el fin de semana pasado por falsificación de documentos y otros cargos. Otros funcionarios de alto rango del Gobierno anterior también podrían enfrentar cargos, mientras la investigación se amplía.

A principios de este mes, la Junta de Auditoría e Inspección (BAI, por sus siglas en inglés) anunció el resultado de su inspección de dos meses sobre el manejo del caso por parte del Gobierno de Moon y solicitó a la fiscalía que investigara a 20 personas, de cinco agencias gubernamentales, involucradas en el caso.

Este jueves, el ex jefe del personal presidencial Noh Young-min, el exdirector del Servicio de Inteligencia Nacional (NIS) Park Jie-won y el exasesor de seguridad nacional Suh Hoon realizaron una conferencia de prensa conjunta, alegando que llegaron a la conclusión a través de un razonamiento lógico y acusaron al auditor estatal de distorsionar la verdad.

Los exfuncionarios dijeron, que en ese momento, el servicio de inteligencia mostró a Lee expresando su intención de desertar al Norte, y preguntaron cómo podría haber constituido una manipulación el haber incluido esa información de inteligencia.

Suh dijo que ni siquiera se podrían imaginar llevando a cabo manipulaciones infundadas sobre la vida y el honor de un ciudadano.

Los funcionarios también negaron las acusaciones de que el Gobierno de Moon no hizo lo suficiente para salvar a Lee y añadieron que era imposible rescatarlo mientras se encontrara en aguas de Corea del Norte.

Dijeron que el Gobierno actual debería proporcionar motivos claros y argumentos sobre por qué Lee desapareció, si cree que no buscaba desertar, y agregaron que no tenían ninguna razón para manipular el caso, ni habrían obtenido ningún beneficio si lo hubieran hecho.

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