Los ciudadanos de edad avanzada representan el 17,5 por ciento de la población surcoreana en 2022

Seúl, 29 de septiembre (Yonhap) -- Las personas mayores de 65 años han representado un 17,5 por ciento de la población surcoreana este año, en medio del rápido envejecimiento de la población, han mostrado, este jueves, datos de la Oficina Nacional de Estadística, resaltando las preocupaciones de que el cambio demográfico podría afectar a la economía del país.

Según los datos, este año se registraron 9,02 millones de personas de edad avanzada entre la población total del país, de 51,6 millones de habitantes.

Se espera que la cifra siga en aumento, hasta alcanzar los 10,6 millones en 2025, o el 20,6 por ciento de la población total, convirtiendo al país en una sociedad superenvejecida.

Es posible que tan solo en un período de siete años el país se convierta de una sociedad envejecida, en la que la población de tal grupo etario se sitúa en el 14 por ciento o por encima de este, a una superenvejecida, en la que supera el 20 por ciento.

El ritmo de envejecimiento de Corea del Sur es muy rápido en comparación con otros países importantes. Japón, el país más envejecido del mundo, tardó 10 años en convertirse en una sociedad superenvejecida.

En medio del rápido envejecimiento, se espera que la proporción de personas mayores de 65 años en Corea del Sur alcance el 30,1 por ciento en 2035 y supere el 40 por ciento en 2050, mostraron los datos.

La agencia de estadísticas dijo, en un informe por separado, que se pronostica que Corea del Sur se convertirá en el país más envejecido del mundo en 2044. En 2070, alrededor del 46 por ciento de su población serán personas de edad avanzada, agregó.

El rápido envejecimiento de la población, junto con las bajas tasas de natalidad sin precedentes, podría suponer un lastre para la economía de la nación, ya que la población en edad laboral, o de 15 a 64 años, disminuirá a un ritmo acelerado.

Los expertos han advertido que Corea del Sur podría enfrentarse a un "terremoto demográfico", lo cual equivale a un alto impacto demográfico provocado por un declive de la población y un rápido envejecimiento, a partir de 2030-40, en caso de que no se aborde rápidamente la cuestión.

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