(AMPLIACIÓN) El expresidente fallecido Roh pide perdón a las víctimas del levantamiento democrático en su última voluntad
Seúl, 27 de octubre (Yonhap) -- El expresidente surcoreano Roh Tae-woo ha utilizado su última voluntad para pedir perdón a las víctimas de la brutal represión militar contra un levantamiento a favor de la democracia en la ciudad suroccidental de Gwangju, en 1980, dijo su hijo, este miércoles.
En un altar fúnebre por el difunto presidente, establecido en Seúl, su hijo, Roh Jae-heon, reveló a los reporteros el testamento de su padre, quien falleció, el martes, de una enfermedad crónica, a los 88 años de edad.
Roh Jae-heon dijo que su padre pensó que tenía una responsabilidad infinita por todas las cosas que pasaron, fueran buenas o malas, porque se preocupaba mucho por el país y su deber. Agregó que buscaba el perdón por sus faltas y responsabilidad, particularmente aquellas relacionadas con el dolor de las víctimas del Movimiento Democrático del 18 de Mayo y varios acontecimientos que ocurrieron durante su mandato.
Roh Tae-woo, quien ejerció como presidente de 1988 a 1993, cobró protagonismo después de ayudar a Chun Doo-hwan a convertirse en presidente, en un golpe de Estado, en 1979, tras un vacío político creado por la muerte del presidente autoritario Park Chung-hee.
Roh fue considerado el hombre nº 2 en la junta de Chun y fue acusado de reprimir sin piedad el levantamiento de 1980 en Gwangju, dejando más de 200 fallecidos y 1.800 heridos, según datos oficiales conservadores.
Roh Jae-heon dijo que el expresidente hizo esfuerzos para la reconciliación y trató de curar las cicatrices de las víctimas del Movimiento Democrático del 18 de Mayo durante su mandato, incluso promulgando una ley relacionada con ese asunto. Agregó que, sin embargo, fue castigado luego por la represión del Movimiento Democrático del 18 de Mayo y varias situaciones políticas no le permitieron transmitir tal mensaje.
En 1996, Roh y Chun fueron condenados por corrupción y motín por su rol en el golpe de Estado de 1979 y la brutal represión del Movimiento Democrático de Gwangju, en 1980.
Roh fue indultado un año más tarde y pagó tardíamente sus multas masivas, en su totalidad, en 2013.
Su hijo dijo que es una lástima que no pudiera expresar esas palabras por sí mismo, ya que estuvo hospitalizado durante más de 10 años, mientras tenía dificultades para comunicarse con los demás.
El expresidente fue operado de cáncer de próstata en 2002 y fue internado en hospitales con frecuencia mientras vivía en su residencia, en Seúl. También sufrió de atrofia cerebelosa y asma, que en su conjunto lo mantuvieron fuera de la mirada pública.
Roh Jae-heon, quien es abogado en la actualidad, a menudo ha expresado disculpas, en nombre de su padre, por la brutal represión en Gwangju.
En 2019, visitó el Cementerio Nacional del 18 de Mayo de Gwangju y expresó sus disculpas. El año pasado, ofreció una corona de flores en nombre de su padre.
hana@yna.co.kr
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